Algunos Kamados no sólo permiten una regulación precisa de la temperatura, sino que también tiene un enorme rango de temperatura de 70 a 350 ° C.
Puede llegar incluso más alto, pero esto no es realmente necesario y afecta la durabilidad del fieltro alrededor de la base y la tapa de cerámica.
¿Quieres hornear pizzas con una deliciosa base crujiente a alta temperatura?
Encienda el carbón abriendo completamente las rejillas de ventilación.
Esto permitirá que el oxígeno haga su trabajo, haciendo que el carbón se queme más intensamente y provocando que la temperatura suba.
Si optas por una sesión baja y lenta para hacer carne de cerdo desmenuzada, por ejemplo, limite la cantidad de oxígeno y esto bajará la temperatura.
Pronto descubrirás lo fácil que es regular la temperatura de tu kamado.
Los accesorios no son imprescindibles pero sí hacen que tu barbacoa de cerámica sea más versátil.
Puedes crear una barrera entre el carbón incandescente y su ingrediente o plato con un escudo térmico debajo de la rejilla, lo que le permite cocinar indirectamente.
Esta es la configuración perfecta para hornear pan crujiente o un delicioso pastel o un plato de cocción lenta y baja.
Si coloca una piedra para pizza en su parrilla, puede convertir la parrilla kamado en un horno de piedra para una pizza perfecta. ¿O qué tal un Flammkuchen con una deliciosa base crujiente?
Si quieres cocinar o guisar, es indispensable una buena sartén resistente al calor como la Holandesa.
Puedes asar en una parrilla estándar, pero para los verdaderos maestros de la parrilla, una parrilla de hierro fundido es la herramienta perfecta para crear un hermoso patrón de parrilla.
¡Hay muchos accesorios disponibles para hacer que cocinar en un kamado sea aún más versátil!
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